Puede que hayamos llegado al primer reto conflictivo de #labrujulachallenge. El sueño es el gran abandonado en el ámbito de la salud. Este reto 4: dormir un mínimo de 7 horas diarias en muchas ocasiones es una utopía.

Soy consciente de que cada persona es un mundo, cada uno tenemos nuestra vida y las circunstancias que nos rodean son muy dispares. Hay gente que puede optar a una mejor disposición para conciliar el sueño, pero también hay mucha gente que su día a día no se lo pone fácil. Trabajos a turnos, viajes, hijos, etc. Son todo factores que influyen altamente en la calidad y cantidad del sueño.
Esto es totalmente comprensible, y me pongo al máximo en tu lugar. Pero luego están las afirmaciones del tipo: “ya dormiré cuando me muera”, “dormir es de cobardes”, “yo con 4 o 5 horas ya me vale” … Estas son las cosas que hacen daño. Dormir un mínimo de 7 horas diarias es el tercer pilar de la buena salud, junto con el ejercicio y la nutrición. Cuanto más corto sea tu sueño, más corta será tu vida. Las principales causas de enfermedad y muerte en los países desarrollados tienen vínculos causales con la falta de sueño. Puedes comprobar estos datos en la genial obra de Matthew Walker “¿Por qué dormimos?”
Así que, llegados a este punto, el reto de esta semana es el reto 4: dormir un mínimo de 7 horas diarias. Si no lo haces, ponte a ello. Si ya lo haces, aumenta media hora de sueño, hasta un máximo de 9 horas. Dormir más de 9 horas, ni es necesario, ni reporta beneficios.
Entiendo perfectamente la complicación de poder conciliar el sueño en todas las situaciones, pero necesitamos hacer un esfuerzo. Lo vas a conseguir.
¡Te espero en el siguiente!